Jornada de Convivencia
El día 20 de abril se llevó a cabo en el Colegio, por iniciativa de la Dirección, el primer encuentro del Proyecto de Abordaje Integral Institucional para la Promoción de la Convivencia . El mismo fue desarrollado por el Equipo de Orientación Educativa y contó con la participación de preceptores, docentes y alumnos.
¿Qué significa promover la convivencia?
Los conflictos son parte inherente de la convivencia entre personas. En la medida en que somos diferentes, pensamos en forma diferente y tenemos intereses, actitudes y preferencias distintas los unos de los otros, es inevitable que surjan conflictos o desacuerdos en la convivencia cotidiana.
No es necesario resolver todos los desacuerdos, pero sí decidir acerca de los conflictos; es decir, aquellas situaciones en que el desacuerdo constituye una amenaza para uno o para todos. Los conflictos bien abordados pueden constituir una oportunidad de crecimiento para las personas y de cambio para los grupos en los que se presentan.
El paradigma que concibe lo convivencial como central en el funcionamiento de la institución educativa, nos posiciona en un territorio que merece ser revisitado, en términos de revisar las lógicas y las dinámicas que subyacen el comportamiento, en términos relacionales, de los distintos miembros de la comunidad educativa: alumnos, docentes, personal directivo, personal auxiliar, padres, etc.
La configuración de un marco común de convivencia, de un marco normativo contextualizado y orientado con sentido pedagógico, que posibilite la reflexión, la conformación de sujetos críticos, sin exceder las asimetrías que se desprenden de la relación entre los distintos roles dentro del espacio escolar y que son propios del vínculo pedagógico; responde al nuevo marco paradigmático en el cual los adolescentes y los adultos referentes observan su condición ineludible de Sujetos de Derecho, lo que implica la necesidad de una construcción colectiva de determinadas normas que rijan al espacio compartido de la institución educativa.
En este sentido, entendemos a la convivencia como un proceso en el que todos los actores que integran a una comunidad educativa se relacionan y vinculan desde el reconocimiento y la aceptación mutua y no desde la imposición de pretender que el "otro" cambie y sea adaptable a determinada normativa impuesta unilateralmente por un determinado sector.
Las viejas concepciones que reducen a la complejidad que entraña las relaciones vinculares entre los sujetos, en un contexto institucional, a "lo disciplinario"; no brinda los adecuados parámetros para afrontar con eficiencia y eficacia, a las problemáticas y a la diversidad que cotidianamente atraviesan a las dinámicas escolares.
Por su parte, la convivencia se entiende como una coordinación de acuerdos que surgen a partir de consensuar y negociar intereses, a veces contrapuestos, de los diferentes actores que integran esta institución educativa.
A través del tiempo, el Colegio Illia ha generado espacios institucionales, en los cuales se problematizaron las cuestiones críticas involucradas en la convivencia institucional; con el propósito de elaborar aportes que sirvieran de basamento para promover una normativa institucional que aportara elementos de referencia, para la toma de decisiones en situaciones críticas, esto es, concertar acciones que dieran respuesta institucional a la hora de afrontar problemáticas específicas.
El presente proyecto contempla una serie de etapas que tienen como meta finalizar el ciclo 2016 con la elaboración de un marco normativo institucional de convivencia, y sentar las bases para la conformación y puesta en funcionamiento en el 2017 del Consejo de Convivencia, que sería el órgano colegiado institucional responsable de analizar, evaluar y deliberar asuntos que mejoren la convivencia al interior del colegio.
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¿Qué significa promover la convivencia?
Los conflictos son parte inherente de la convivencia entre personas. En la medida en que somos diferentes, pensamos en forma diferente y tenemos intereses, actitudes y preferencias distintas los unos de los otros, es inevitable que surjan conflictos o desacuerdos en la convivencia cotidiana.
No es necesario resolver todos los desacuerdos, pero sí decidir acerca de los conflictos; es decir, aquellas situaciones en que el desacuerdo constituye una amenaza para uno o para todos. Los conflictos bien abordados pueden constituir una oportunidad de crecimiento para las personas y de cambio para los grupos en los que se presentan.
El paradigma que concibe lo convivencial como central en el funcionamiento de la institución educativa, nos posiciona en un territorio que merece ser revisitado, en términos de revisar las lógicas y las dinámicas que subyacen el comportamiento, en términos relacionales, de los distintos miembros de la comunidad educativa: alumnos, docentes, personal directivo, personal auxiliar, padres, etc.
La configuración de un marco común de convivencia, de un marco normativo contextualizado y orientado con sentido pedagógico, que posibilite la reflexión, la conformación de sujetos críticos, sin exceder las asimetrías que se desprenden de la relación entre los distintos roles dentro del espacio escolar y que son propios del vínculo pedagógico; responde al nuevo marco paradigmático en el cual los adolescentes y los adultos referentes observan su condición ineludible de Sujetos de Derecho, lo que implica la necesidad de una construcción colectiva de determinadas normas que rijan al espacio compartido de la institución educativa.
En este sentido, entendemos a la convivencia como un proceso en el que todos los actores que integran a una comunidad educativa se relacionan y vinculan desde el reconocimiento y la aceptación mutua y no desde la imposición de pretender que el "otro" cambie y sea adaptable a determinada normativa impuesta unilateralmente por un determinado sector.
Las viejas concepciones que reducen a la complejidad que entraña las relaciones vinculares entre los sujetos, en un contexto institucional, a "lo disciplinario"; no brinda los adecuados parámetros para afrontar con eficiencia y eficacia, a las problemáticas y a la diversidad que cotidianamente atraviesan a las dinámicas escolares.
Por su parte, la convivencia se entiende como una coordinación de acuerdos que surgen a partir de consensuar y negociar intereses, a veces contrapuestos, de los diferentes actores que integran esta institución educativa.
A través del tiempo, el Colegio Illia ha generado espacios institucionales, en los cuales se problematizaron las cuestiones críticas involucradas en la convivencia institucional; con el propósito de elaborar aportes que sirvieran de basamento para promover una normativa institucional que aportara elementos de referencia, para la toma de decisiones en situaciones críticas, esto es, concertar acciones que dieran respuesta institucional a la hora de afrontar problemáticas específicas.
El presente proyecto contempla una serie de etapas que tienen como meta finalizar el ciclo 2016 con la elaboración de un marco normativo institucional de convivencia, y sentar las bases para la conformación y puesta en funcionamiento en el 2017 del Consejo de Convivencia, que sería el órgano colegiado institucional responsable de analizar, evaluar y deliberar asuntos que mejoren la convivencia al interior del colegio.
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